¿Vivo mi vida de prisa? ¿Cómo le estoy guiando a mi familia a vivir?

Alguien una vez describió la vida como una canción…Dios escribe las palabras y nosotros les ponemos música de acuerdo a nuestro gusto. El ritmo de nuestro cantar puede ser alegre, dulce o triste…según el ritmo que escojamos para cantarla.

Hay que vivir nuestra vida como una gran aventura. Como toda aventura, tiene sus altibajos y esto nos forma en todo nuestro caminar…hasta llegar a ser la joya preciosa que Dios recibe en Su morada (el Cielo).

Dedícate hoy a vivir tu vida menos acelerada…para que puedas apreciar lo bello en tu ambiente: tus seres queridos, tus amigos, y aún más importante…la grandeza de Dios.