[Jesús dijo], llamen y se les abrirá...

Soy madre de cuatro: 3 hijos y una hija…
Todos los días me hago la siguiente pregunta en mi caminar como mujer, esposa y madre:
¿Cuán arduamente voy a luchar, contra todo obstáculo, para conseguir lo bueno que me he propuesto?

Hay días en que uno se cansa de hacer o decir lo mismo en formación de los hijos: “escoge buenas compañías”, “no hagas cosas malas que parezcan buenas…”, “ayuda a los necesitados…con prudencia”, etc.…
Probablemente uno se sienta cansada porque la lucha diaria es contra el enemigo que constantemente quiere seducirnos (a los hijos, esposos y a uno también…)
Nosotras madres que somos el amor y corazón del hogar, podemos recordarles a nuestros seres amados que basta con “llamar a la puerta […]” y ¡Dios nos escucha y anima en todo!

Caminemos unidas en nuestra vocación como mujeres, esposas y madres católicas… y recordemos siempre, que Dios escucha nuestros corazones sinceros y sedientos de su amor eterno.

La Divina Providencia nos indicará por donde andar y hasta cómo pedir las cosas cuando oramos…Solamente hay que seguir llamando a la puerta sin desesperar. Porque Dios acomoda todo para nuestro bien y el de nuestras familias.

Amando la Caridad

No importa la edad de sus hijos , sea que son pequeños y viven con usted o ellos han crecido y se han ido, amando  la persona completa de su cónyuge es una necesidad absoluta para mantener su matrimonio prosperando. Se orienta toda su acción hacia el amar la caridad.

Recuerda de bendecir a tus hijos diariamente...

Se nos recuerda que más vale (o más bien dicho es mejor) bendecir a todos...que maldecir o hablar mal de nuestros vecinos...empezando por nuestra propia familia, esposo, hijos, padres, tíos/tías, primos, abuelos, y ...

Todos los días y sin fallar, nosotros nos bendecimos antes de salir del hogar...
Mi esposo me bendice (me le acerco con amor y respeto...) y le pido me bendiga. Y él se ha acostumbrado a pedirme le bendiga también. Como esposos, es de suma importancia que recordemos nuestro caminar matrimonial. El matrimonio es nuestra vía de santificación: el uno para el otro.

Los hijos ven que los padres se bendicen mutuamente y ellos participan en el diario bendecir de la familia con corazones abiertos y alegres.

Nunca olvidemos de bendecir a nuestros esposos e hijos día con día...y de pedirles nos bendigan a nosotras también. Dios nos bendice por medio de nuestros seres amados...seamos un rayito de sol y alegría para nuestras familias... para poder regar bendiciones en todo el mundo que se encuentra tan necesitado de luz.

La Responsabilidad es...

•          3) La Responsabilidad es: trabajo en el patio…

¿Por qué no hacer de la tarea de rastrillar, cortar el césped y la jardinería un día familiar? Planifiquen un premio al final, como pedir una pizza o salir a comer un helado. Los hijos aprenden el ser responsables cuando se les invita a trabajar juntos. Todos trabajamos porque somos responsables.

receta para un matrimonio feliz

Ingredientes:

3 tazas de amor
2 tazas de bondad
1 taza de respeto
1 taza de cortesía
4 cucharadas de esperanza
una pinta de la fe
y porciones generosas de la paciencia, y otras virtudes cristianas. . .

El Camino Cristiano para las parejas casadas debe de recordar siempre esta sencilla receta de ingredientes. Si procuramos usar todos los ingredientes debidamente, nuestro matrimonio puede desenvolverse y llegar a ser algo “netamente” divino…puesto que es así como Dios lo ha consagrado.

Y, si por alguna razón tu matrimonio no marcha por este camino, ocúpate de hacer limpieza general en tu propia casa (o corazón…) acudiendo a confesarte seguido y así restaurar tu santuario para el Rey de reyes.

Padres y Abuelos Reflejan el amor de Dios Padre

En el mes de junio celebramos a los padres y abuelos, esos hombres valientes y entregados que están llamados a dar la vida por sus esposas e hijos. Los padres son los cimientos donde se forma la imagen del hombre en los hijos, una imagen que debe emular el amor de Dios. Son también fuente de seguridad, protección y guía no solo para los hijos, sino para el matrimonio y la familia. Pero muchas personas no se dan cuenta de la suprema importancia de la presencia y figura del padre en la familia, la iglesia y la sociedad, y como consecuencia toman a la ligera su rol central, particularmente en la vida de los hijos. Por ello, lamentablemente el 50% de los niños hispanos en los Estados Unidos nacen o crecen sin la figura de un padre.

Pocos saben que las hijas, en la crucial edad de la adolescencia, miran al padre como imagen del hombre con el que algún día se casarán. Por ello, si se desea que una hija contraiga matrimonio con un hombre recto, trabajador, buen proveedor, temeroso de Dios, íntegro, libre de vicios, valiente, respetuoso y fiel, entonces el padre debe poseer y vivir esas cualidades. También la presencia y compañía del padre es vital en el sano desarrollo de los hijos, pues es en la figura del padre que el hijo desarrolla la imagen de lo que un hombre está llamado a ser.

Padres y abuelos están llamados a dar su tiempo y atención a sus hijos, tiempo que debe ser de calidad. Son muchos los que creen que con solo proveer cosas materiales se está siendo un buen padre. Los estudios reflejan que lo que más anhelan los hijos, es tener una relación cercana y amorosa con su padre; uno que escuche sus preocupaciones, conteste sus preguntas de vida y les guie con madurez, experiencia, aplomo y valores, por la senda de la vida. Padres, tomen el tiempo de demostrar a sus hijos cuan importantes son en su vida y cuanto les aman.

El legado de vida que deja un padre amoroso, recto, protector y ejemplar es el fundamento para un matrimonio y una familia sana y feliz. Un padre amoroso y responsable deja una huella imborrable en el corazón de los hijos que refleja la imagen de nuestro Padre Dios. Invitamos a los hombres, en especial a los futuros padres, a ser padres amorosos y responsables y a los hijos e hijas, esposas y demás familiares a celebrar el regalo precioso de nuestros padres.

PorTuMatrimonio

La madre corazón del hogar

La madre puede dar mayor contribución a la familia como corazón del hogar y compañera de su esposo, no como su cabeza. Los hijos deben aprender de ella a amar a los demás y a entregarse generosamente con espíritu de sacrificio. La madre nunca debe subestimar la importancia de su papel. Porque de ella depende el crecimiento emotivo de sus hijos, y ese crecimiento los preparará mejor para vivir vidas felices y santas que cualquier educación intelectual que puedan recibir.

Preguntas que me debo hacer para mi diario caminar como corazón de mi hogar:
1.- ¿Procuro ser modesta en mi vestido? ¿recordando que soy ejemplo para mis hijos e hijas
2.- ¿Dedico tiempo a la oración diaria con Dios? ¿recordando que mi crecimiento espiritual me hace madurar como mujer y alma de mi casa...?

Recordemos siempre - lo siguiente - para con nosotras mismas que somos el corazón del hogar y guia espiritual de nuestra familia...
Ustedes son la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad construida sobre un monte. No se enciende una lámpara para meterla en un cajón, sino que se pone en el candelero para que alumbre a todos los de la casa. Brille igualmente la luz de ustedes ante los hombres (su esposo e hijos...), de modo que cuando ellos vean sus buenas obras, glorifiquen al Padre de todos que está en el cielo...(Mateo 5:14-16)

La Seguridad en familia es...

•          2) La Seguridad en familia es: comer juntos. Hornear y cocinar juntos…

 Alarguen el tiempo de comida de su familia, ayudando en la preparación de las comidas juntos. Hagan galletas o dulces para regalar a sus vecinos y familiares. El tiempo de comida debe ser para compartir cosas buenas y así dar mayor seguridad a los hijos.